František Ženíšek, nacido el 25 de mayo de 1849 y fallecido el 15 de noviembre de 1916, fue un pintor checo que jugó un papel importante en el panorama artístico y cultural de su época. Formó parte de la “Generace Národního divadla” (Generación del Teatro Nacional), un colectivo de artistas con simpatías nacionalistas, cuyo objetivo era promover la identidad y el orgullo checos a través de sus obras.
Nacido en una familia de comerciantes en Praga, Ženíšek mostró una inclinación natural hacia el arte desde una edad temprana. A pesar de la resistencia inicial de su padre, se le concedió permiso para perseguir sus aspiraciones artísticas y recibió lecciones de Karel Javůrek cuando aún estaba en la escuela. Más tarde, de 1863 a 1865, estudió en la Academia de Bellas Artes bajo la dirección de Eduard von Engerth. Después de un breve período en Viena, como asistente de Engerth en la Ópera Estatal, regresó a la Academia de Praga para trabajar con Jan Swerts y el pintor de historia Josef Matyáš Trenkwald.
En 1875, Ženíšek recibió un importante encargo para pintar murales en el ayuntamiento de Courtrai, Bélgica, lo que marcó un hito importante en su carrera. Tres años más tarde, durante un viaje de estudios a París, entabló una amistad crucial con Josef Šebestián Daubek, un renombrado mecenas de las artes. Daubek invitó a Ženíšek a decorar su residencia en Liteň e incluso lo acompañó en su luna de miel a Holanda, donde Ženíšek pintó un retrato de la pareja de recién casados.
Al regresar de París, Ženíšek, junto con Mikoláš Aleš, ganó un concurso para decorar el vestíbulo del Teatro Nacional con diseños históricos y alegóricos. También emprendió la tarea de decorar el techo del auditorio y diseñar un telón, aunque este último lamentablemente fue destruido en un incendio en 1881. Además, Ženíšek adornó las ventanas de la iglesia de Karlín, creó lunetos en el Museo Nacional y pintó más de 80 retratos. , mostrando su versatilidad como artista.
De 1885 a 1896, Ženíšek ocupó una cátedra en la Academia de Artes, Arquitectura y Diseño, donde fue mentor de Jakub Schikaneder como su asistente. Más tarde se convirtió en profesor en la Academia de Bellas Artes de 1896 a 1915, donde entre sus estudiantes se encontraban artistas notables como Jaroslav Špillar y Jan Preisler. En 1898, desempeñó un papel fundamental en la fundación de la “Jednota umělců výtvarných” (Unión de Bellas Artes), una organización destinada a promover las perspectivas nacionalistas checas en las artes.
František Ženíšek falleció el 15 de noviembre de 1916 en Praga, dejando un importante legado artístico. Su hijo, František (1877–1935), siguió sus pasos y se convirtió en un destacado pintor por derecho propio, contribuyendo aún más al patrimonio artístico de la familia.
La carrera artística de František Ženíšek y su participación en el movimiento nacionalista checo ejemplifican su dedicación tanto a su oficio como a su identidad cultural. A través de sus obras y enseñanzas, dejó una huella indeleble en la escena artística checa, inspirando a las futuras generaciones de artistas a expresar su espíritu nacionalista y preservar su herencia cultural.
Golpes: 0